viernes, 20 de noviembre de 2009

¡Basta de fascismo y represión! ¡Lo llaman democracia y no lo es!


En este nuevo 20 de noviembre, partimos de una situación de crisis capitalista, en la que el gobierno de ZP se ha mostrado digno sucesor del de Aznar. Con una tasa de paro del 25% en Andalucía, con el 63% de los trabajadores del Estado español cobrando menos de 1.000 euros, el PSOE le inyecta miles de millones a la banca, mientras los sindicatos mayoritarios pactan congelaciones salariales.

La represión fascista del Estado se ceba sobre la clase obrera y popular. Los inmigrantes irregulares podrán ser internados por 60 días, antes de ser expulsados. Los jornaleros del SAT son apaleados por la policía. La izquierda patriota vasca es perseguida y encarcelada, en virtud de la Ley de Partidos. La Constitución española blinda una monarquía impuesta por el fascismo de Franco.

Por si fuera poco, se producen 4.000 agresiones fascistas cada año, con una significativa impunidad. En contraste, 17 antifascistas malagueños fueron detenidos en febrero. Las manifestaciones fascistas son escoltadas por la policía, la misma que apalea brutalmente nuestras manifestaciones, cuando no son previamente prohibidas. En los últimos 19 años se han producido 70 asesinatos, el último el del compañero Carlos Palomino a manos de un militar neonazi. En nuestra propia ciudad, la xenofobia fascista se moviliza contra la mezquita de San Jerónimo.

En esta situación, se hace necesario comprender la relación existente entre la crisis, la reacción ante la misma de los trabajadores y las nacionalidades oprimidas, y la represión del Estado. Un Estado español que, en franca deriva fascista, persigue y amenaza la propia existencia de nuestras organizaciones, a la vez que hace la vista gorda ante las agresiones ultraderechistas.

Por todo lo anterior, nos vemos obligados a salir otro 20N a la calle para exigir el cese de toda la represión, el final de las agresiones fascistas sobre la clase trabajadora nativa y extranjera y los sectores populares.